Llegaron como se esperaba las abundantes lluvias de verano y, con ellas, el malestar en el sector rural de Blaquier y la zona por el exceso de agua, sin rumbo, anegando campos y caminos, destruyendo sembrados y pasturas en parcelas que no deberían haberse inundado, con un tremendo daño moral y económico que, lamentablemente, con el bolsillo ya maltrecho de productores tenemos que volver a soportar.... Continuar leyendo